PC para CS:GO: Requisitos y configuraciones recomendadas

PC para CSGO

Tanto si quieres jugar de forma casual a Counter Strike: Global Offensive (CS:GO), como si planeas jugar de forma más competitiva, necesitas un equipo que responda bien a las necesidades de este título, y que ajustándose al presupuesto que tengas, te ofrezca la mejor experiencia posible. No obstante, contar con un buen PC no sólo hará que el juego resulte más fluido e impactante visualmente, si no que además te otorgará una importante ventaja competitiva sobre tus rivales.

En este artículo vamos a ver qué tipo de hardware se ajusta mejor al juego de Valve y a continuación te ofreceremos tres configuraciones distintas, para que puedas elegir en función de tus posibilidades económicas y la resolución a la que vayas a jugar. Creemos que esta guía puede resultarte especialmente útil, ya que Valve no ha publicado los requisitos recomendados, sólo los mínimos, por lo que algunos jugadores pueden sentirse un poco perdidos a la hora de escoger el mejor PC para CS:GO

En primer lugar, vamos a ver cuáles son los requisitos de CS:GO. Ya te adelantamos que son muy asequibles:

Requisitos para Counter Strike: Global Offensive

Requisitos mínimos para PC

Requisitos mínimos para Mac

Como ves, casi cualquier ordenador actual va a poder con CS:GO, pero es que también muchos con varios años de antigüedad.

Mejores PC para CS:GO

Ir con los requisitos justos no es nunca muy recomendable, y menos aún si hablamos de títulos como este, que requieren un buen tiempo de respuesta y cuyo frenético ritmo necesita una tasa de FPS estable y una experiencia de juego sin tirones.

Además, al tratarse de un juego que tiene bastantes años de antigüedad (aunque periódicamente se lanzan actualizaciones y mejoras), aunque quisiéramos montar un ordenador siguiendo los requisitos mínimos no podríamos, ya que la mayoría de componentes hace tiempo que están descatalogados.

Por tanto, a continuación vamos a ofrecer algunas configuraciones para Counter Strike: Global Offensive de varios presupuestos y aptos para diferentes resoluciones.

Si el principal uso que vas a dar a tu PC es jugar a CS:GO, es muy importante que no te quedes corto (algo realmente fácil de conseguir) pero también que no gastes más dinero del necesario en un equipo excesivo, puesto que como ya hemos visto, los requisitos son realmente bajos.

Otro apunte que debemos hacer es que CS:GO depende más del procesador que de la gráfica, aunque no utiliza muchos núcleos. Por ello, es mejor que la CPU elegida tenga un buen rendimiento en cada núcleo individual, y no tanto en tareas multi-núcleo. Este factor será muy importante a la hora de configurar nuestro equipo.

PC para CS:GO por 400 euros (1080p)

Vamos a empezar con la configuración más económica, apta para presupuestos escasos y especialmente enfocada para resoluciones de 1920 x 1080. Para empezar, hemos optado por montar un Pentium G4560. Es un procesador ridículamente barato (cuesta lo mismo que algunos de los juegos más caros) para todo lo que ofrece. Tiene doble núcleo, con cuatro hilos gracias a la tecnología hyper-threading, y ya hemos dicho que el CS:GO no es un juego multi-núcleo, por lo que ¿para qué necesitamos más?

Para la tarjeta gráfica nos quedamos con la GTX 1050, con la que seremos capaces de alcanzar más de 144 FPS en 1080p. Y eso que aún estamos en nuestra configuración más barata… A eso es a lo que nos referíamos con los peligros de montar un PC excesivo para un juego tan poco demandante.

En el lado de AMD, también la RX 560 nos va a ofrecer unos resultados similares, pero a igualdad de precios (y a día de hoy están muy parejos) preferimos la GTX 1050, ya que si bien para el CS:GO la diferencia no va a ser mucha, en otros juegos más exigentes el rendimiento de esta sí es superior.

Realmente con esta configuración podemos jugar también sin problemas hasta en 1440p, aunque en ese caso el framerate se verá reducido en ocasiones hasta 60 o 70 FPS. Que, todo sea dicho, sigue siendo una buena cifra, sobre todo si tienes un monitor de 60Hz y no te propones competir muy en serio.

En cuanto a la placa base, la Gigabyte B250M-D2V es una placa de formato ATX que por menos de 70 euros nos brinda las funcionalidades más básicas que podemos necesitar, y algunas más (M.2, USB 3.1).

[table id=15 /]

PC para CS:GO por 700 euros (1440p)

Esta opción intermedia nos permitirá jugar a mayores resoluciones y además manteniendo más de 144 FPS estables. Para ello vamos a subir la apuesta con la CPU y vamos a ir por un Intel Core i5.

Ahora bien, ¿qué i5? Como CS:GO no exige demasiado, prácticamente cualquier i5, incluso desde los Sandy Bridge (i5-2xxx) haría bien el trabajo. Pero por lo general no recomendamos hacerse con un procesador muy antiguo, ya que además de ser difíciles de encontrar y tener precios inflados, son un lastre si queremos actualizar nuestro equipo en un futuro.

Por eso, nos quedamos con el i5-8400, es decir, un modelo de última generación. Este modelo tiene 6 núcleos, una frecuencia base de 2,8 GHz y turbo de 4 GHz, y 9 MB de memoria caché.

En cuanto a la gráfica, en esta ocasión optamos por la GTX 1050 Ti. Si bien la Radeon RX 570 o la GTX 1060 de 3 GB nos ofrecen un rendimiento superior, también resultan bastante más caras, y como hemos visto no necesitamos una gráfica muy potente para hacer correr este juego a una buena velocidad.

 

[table id=16 /]

PC para CS:GO por 1.000 euros (4K)

Con este último PC podremos jugar a altas tasas de frames en 1440p y también en 4K. Está enfocado para jugadores entusiastas, que quieran jugar en niveles competitivos. Y no sólo nos servirá para CS:GO, sino también para cualquiera de los últimos títulos AAA lanzados al mercado.

Como CPU seguimos con un i5, aunque vamos a subir un par de peldaños: vamos con el Intel Core i5-8600K, es decir, un procesador de generación Coffee Lake, y además con su versión desbloqueada, por lo que podremos hacer overclocking para conseguir una velocidad mayor.

Tiene seis núcleos y cuenta con una frecuencia de base de 3,6 GHz y de 4,3GHz en turbo, pudiendo llegar a los 4,7GHz solo con un OC moderado. Es cierto que podríamos lanzarnos por un i7, pero este juego realmente no necesita tanta potencia.

Tampoco hace falta tirar la casa por la ventana con la tarjeta gráfica para conseguir un gameplay fluido. Nosotros hemos optado por una GTX 1060 de 6 GB, que incluso en monitores 4K es capaz de mantener una buena tasa de frames con unos ajustes altos. Pero si te puedes permitir una GTX 1070, no dudes en dar el salto, ya que si tienes un monitor de esa resolución seguramente querrás sacarle todo el partido con juegos más demandantes.

Con respecto a las dos configuraciones anteriores, también hemos añadido un ventilador Cooler Master Hyper 212 que nos facilitará el OC y un SSD WD Black PCIe de 256 GB, para poder cargar tanto Windows como el propio juego y los distintos mapas más rápido.

Con este combo vamos a alcanzar jugar a 144 FPS o más, incluso en 4K. Desde luego a nosotros nos parece más que suficiente.

[table id=17 /]
Salir de la versión móvil